sábado, 20 de octubre de 2012

HISTORIAS DESDE EL PAÍS DE LA DISCORDIA



Virginia Collera

"¿Por qué, por qué, por qué les regalé ese libro?", se pregunta el veterano periodista británico Paul Mason en el prólogo del e-book Discordia (Vintage Digital). Era un ejemplar de la antología The New Journalism de Tom Wolfe. Él simplemente buscaba que una joven y prometedora periodista -Laurie Penny- viera cómo escribían reportajes los grandes maestros del género: Gay Talese, Truman Capote, George Plimpton, Hunter S. Thompson..."El capítulo en el que Hunter S. Thompson y el ilustrador Ralph Steadman irrumpen en el Derby de Kentucky en 1970, en una bruma de racismo, gas pimienta y embriaguez absoluta, pretendía ser un estudio de caso, no un manual de instrucciones".

Poco después, Laurie Penny y la ilustradora Molly Crabapple se compraban un billete con destino a Atenas. Querían emular a Thompson & Steadman. Se habían conocido en Londres, compartido noches en vela en las acampadas de Occupy Wall Street en Nueva York y viajaban a la capital griega con la expectativa de ser testigo de las revueltas. "Pero lo fuimos de la calma que se sucede tras ellas", escribe Penny. 


En las ilustraciones de mujeres luchando en la Comuna de París de Daniel Urrabieta Vierge debía inspirarse Molly, sugirió Mason: "Son imágenes sin retórica. Vierge se limita a inmortalizar a mujeres normales en circunstancias extraordinarias". Pero, en realidad, ni rastro de retórica encontraron en los graffitis y mensajes "iracundos" escritos en griego, español e inglés que les sorprendieron nada más llegar a la ciudad el pasado mes de julio. "Atenas es una ciudad anotada", dice Crabapple. Y hay una imagen que les acecha durante los seis días que pasan en ella: la de una chica arrastrando una maleta que se encuentran al doblar cada esquina (la fotografía es cortesía del periodista Kostas Kallergis, autor del blog When the crisis hit the fan).


Precisamente de la fiesta de despedida de un amigo que emigra viene Yiannis Baboulias, periodista y fotógrafo griego de 25 años que, por unos cuantos cigarrillos y comidas y/o cenas calientes, se ofrece a ser su guía ateniense. Él les presenta a los anarquistas, activistas, periodistas, estudiantes, artistas, inmigrantes que habitan un país atravesado por la discordia y un libro de 24.000 palabras y 36 ilustraciones que trata de recoger el miedo y la desesperación -también el arrojo y la lucha- de todos esos griegos aplastados por la crisis.


Discordia de Molly Crabapple y Laurie Penny (de momento, sólo disponible en inglés) está editado por Vintage Digital. Todas las ilustraciones son cortesía de la editorial.


Artículo original en El País