lunes, 11 de junio de 2012

HISTORIA MENOR

"Historia Menor de Grecia" Pedro Olalla
Ed. Acantilado, 2012


He topado con un libro sensacional. Se llama Historia Menor de Grecia y lo firma Pedro Olalla, quien debe de ser uno de los primeros helenistas sabios y documentados que escriben en diversas lenguas, también en español, y que además sabe escribir de una forma visual e inteligente. ¿Tal vez ha ayudado su cuadruple papel de escritor, profesor sagaz y con afán de enseñar, refinado traductor, y director de cine, o, al menos, de documentales, como se nos explica en su biografía preliminar? El volumen cuenta, cuanto menos, con tres aspectos que lo hacen insólito: primero, conoce y quiere contar la historia de una civilización, la de los griegos, echando mano de los hechos más significativos de una manera muy novelesca y, a la vez, con una gran erudición (hay mucha lectura y mucho estudio detrás de estos textos), y sintetizándolos en no más de tres páginas. ¡Y a menudo en menos! Cada escena, fechada y con una acotación geográfica, cuenta una lección histórica, y a veces moral, en el sentido menos académico posible, avalada por una bibliografía que parece sólida, en inglés, ¡en griego moderno!, en italiano y en español, entre otras lenguas. Segundo: no se limita a los tiempos clásicos, ciertamente ejemplares y modélicos –si bien el capítulo que dedica a un discurso de Pericles es extraordinario, bellísimo y acertadísimo–, sino que, con un conocimiento insólito, avanza tanto por la época romana como por la aparición de esa curiosa secta denominada cristiana, así como por la edad media y su ignorancia supina del griego antiguo. Bellísimo el capítulo dedicado a Petrarca, el gran erudito humanista, que busca a alguien capaz de leer en griego antiguo los magníficos textos de Homero. Son especialmente jugosos los episodios ligados a la nueva potencia, Roma, que se admira de los peculiares filósofos griegos, y a las múltiples formas de relación de los europeos con los griegos, inclusi con los mercenarios catalanes, quienes desarrollan una forma inédita de venganza, sentimiento claramente reactivo. No había leído nunca unas páginas tan lúcidas y breves como las dedicadas a la Compañía Catalana y a Roger de Flor. Cabe añadir que el volumen concluye en 1955, en Ischia, con la que es, tal vez, la referencia literaria más antigua conocida en griego. Y tercero: la forma de contar es precisa, visual y sabia. No pretende ser exhaustivo, pero avanza por el tiempo con una prodigiosa e insólita naturalidad.

Andreu Loncà
www.segre.com