Leí por primera vez los poemas de Nikos Kavadías una mañana de verano, mientras tomaba un café en una tabernita del puerto de Polonia, en la isla de Milos, a la espera del barco que me llevaría hasta la cercana Kímolos. La noche anterior me había encontrado por casualidad con una magnífica exposición de libros en una plazuela de Plaka, la capital de la isla, donde me dejé buena parte del presupuesto de mi viaje adquiriendo libros de novela, cuento y poesía de los autores griegos más conocidos. Como agradecimiento a mi buena compra, la simpática vendedora decidió obsequiarme con un pequeño libro de poemas: "Μαραμπού" ("Marabú") de Nikos Kavadías.
Fue entonces cuando descubrí la poesía y el universo de Kavadías, quien por cierto habría cumplido 99 años en el día de hoy. Su obra poética contiene la naturaleza marina que todo griego lleva encima por herencia y tradición, el deseo de vivir en alta mar, de trazar nuevas rutas y navegar al encuentro de exóticos países, sintiendo siempre la nostalgia de la tierra madre: Grecia.
Hablan los versos de Kavadías de la dureza de la vida marinera, de largos turnos de guardia, de noches mal dormidas en sucios colchones, de extrañas y temibles enfermedades, del olor a pescado, de marineros que cargan y descargan pesadas mercancías y compran whisky y amor en cochambrosas tabernas portuarias tras haberse tatuado en el pecho el nombre de la añorada madre. Versos compuestos con frecuencia a base de nombres de extraños países y ciudades lejanas, de un léxico muy personal que bebe no solamente del griego, sino también del inglés, del francés, del español, del italiano, del árabe... y que en ocasiones resultan ser de difícil lectura hasta para el propio lector griego.
Nikos Kavadías deseó desde joven morir lejos de la patria y reposar en el mar profundo; sin embargo murió en su país, en Atenas, en 1975, sabiendo que se iban a cumplir lοs proféticοs versos que escribió durante su juventud en la última estrofa del siguiente poema:
Nikos Kavadías - "Mal du départ"
Música: Yannis Spanós
Intérprete: Kostas Karalis
Seré siempre un ideal e indigno amante
de los largos viajes y los azules mares,
y moriré una tarde, como todas las tardes,
sin rasgar la turbia línea de los horizontes.
Hacia Madrás, Singapur, Argelia y Sfax
partirán como siempre orgullosos los barcos
y yo, inclinado en un despacho ante mapas náuticos
haré sumas en gruesos libros de contabilidad.
Dejaré ya de hablar de lejanos viajes,
mis amigos creerán que ya los he olvidado
y mi madre contenta dirá a quien pregunte:
"Fue un capricho juvenil, pero ahora ya ha pasado...".
Pero mi propio yo una tarde ante mí se alzará
y una razón, como juez despiadado, me pedirá
y esta mano mía indigna que tiembla se armará,
señalará y sin miedo golpeará al culpable.
Y yo que tanto deseé ser enterrado un día
en algún mar profundo de las lejanas Indias,
tendré una muerte común y muy triste
y un entierro como los entierros de muchos hombres.
(Traducción de Nikos-Emmanuel)
Νίκος Καββαδίας - "Mal du départ"
Ερμηνευτής: Κώστας Καράλης
Μουσική: Γιάννης Σπανός
Θα μείνω πάντα ιδανικός κι ανάξιος εραστής
των μακρυσμένων ταξιδιών και των γαλάζιων πόντων,
και θα πεθάνω μια βραδιά, σαν όλες τις βραδιές,
χωρίς να σχίσω τη θολή γραμμή των οριζόντων.
Για το Μαδράς, τη Σιγγαπούρ, τ' Αλγέρι και το Σφαξ
θ' αναχωρούν σαν πάντοτε περήφανα τα πλοία,
κι εγώ, σκυφτός σ' ένα γραφείο με χάρτες ναυτικούς,
θα κάνω αθροίσεις σε χοντρά λογιστικά βιβλία.
Θα πάψω πια για μακρινά ταξίδια να μιλώ
οι φίλοι θα νομίζουνε πως τα' χω πια ξεχάσει,
κι η μάνα μου χαρούμενη θα λέει σ' όποιον ρωτά:
"Ήταν μια λόξα νεανική, μα τώρα έχει περάσει..."
Μα ο εαυτός μου μια βραδιά εμπρός μου θα υψωθεί
και λόγο, ως ένας δικαστής στυγνός, θα μου ζητήσει,
κι αυτό τ' ανάξιο χέρι μου που τρέμει θα οπλιστεί,
θα σημαδέψει κι άφοβα τον φταίχτη θα χτυπήσει.
Κι εγώ που τόσο πόθησα μια μέρα να ταφώ
σε κάποια θάλασσα βαθιά στις μακρινές Ινδίες,
θα 'χω ένα θάνατο κοινό και θλιβερό πολύ
και μια κηδεία σαν των πολλών ανθρώπων τις κηδείες.
Vídeo original en You Tube