La Pasión Griega celebra hoy su cuarto aniversario, momento oportuno para expresar mi agradecimiento a todos los amigos y lectores de este blog. Gracias a quienes solamente leen, a quienes participan con sus comentarios, a aquellos que colaboran con sus artículos ο enviándonos material, sugiriendo temas o echando una mano en la supervisión de las traducciones. Gracias incluso a aquellos que plagian nuestros artículos originales y los publican como propios, porque eso viene a significar que no lo estamos haciendo del todo mal...
Llevar adelante un blog con cierta regularidad no es cosa fácil. Entradas que se leen en tres minutos ocultan a veces horas e incluso días de trabajo, de búsqueda de información, de selección de material, de traducción... En una época en que la información se comparte en las redes sociales casi a la velocidad de la luz, uno se pregunta a veces si merece la pena perder unas cuantas horas casi a diario en esto; y aunque la tentación de dejarlo siempre está ahí, seguimos adelante aunque sólo sea por amor al arte, por amor a Grecia...
Griegos y filohelenos celebramos también la Fiesta Nacional del 25 de marzo, que recuerda el comienzo de la liberación de Grecia del Imperio Otomano. El país, desde luego, no está para demasiados festejos. De hecho, aparte de las celebraciones oficiales, hay también convocadas manifestaciones en varias ciudades en contra de la situación a la que los políticos y los usureros han abocado al país. He querido traducir y reproducir aquí el mensaje que hace unas horas escribió mi amigo Aléxandros, con quien estoy absolutamente de acuerdo y a quien envío desde estas páginas un abrazo y toda mi solidaridad:
Dicen algunos que "el 25 de marzo no es día de manifestación porque es día de unidad nacional"... Y yo pregunto: "¿De unidad nacional con quiénes? ¿Con los traidores?" Incluso si los héroes de 1821 estuvieran en el desfile de mañana, abuchearían a los traidores. No habléis, pues, de unidad nacional y otras estupideces... La manifestación contra los políticos mañana será la auténtica fiesta nacional. ¡Porque la fiesta nacional simboliza la RESISTENCIA, y no la traición!
Tramposos, preparaos para el gran abucheo de mañana. Nadie más tiene la culpa, sólo vosotros que nos habéis traído hasta aquí. No podréis hacer acto de presencia otra vez sin que os injurien. Es lo que merecéis...
¡Mañana, todos a la calle!
Dedicado a Aléxandros y a todos los griegos
que, 191 años después, siguen luchando por su libertad