martes, 25 de marzo de 2008

ΧΡΟΝΙΑ ΠΟΛΛΑ ΕΛΛΑΔΑ!



¡Ay Grecia, Grecia!... Mi querida Grecia:

¡Cómo iba yo a dejar pasar este día sin felicitarte! Hoy, veinticinco de marzo, día en que celebras el aniversario de tu Revolución, de tu rebelión contra el Imperio Otomano que tantos zarpazos dejó marcados en tu cuerpo, en tu corazón y, sobre todo en tu alma.

Hoy te ponen ese vestido sedoso blanco y azul que tan bien te sienta, tal vez para cubrir las heridas que el fuego dejó sobre tu pecho el pasado verano. ¿Qué has hecho, Grecia, para que te quemen con tanta saña, para que te sigan robando nombres, islas e Historia?

Este veinticinco de marzo cantas orgullosa tu "Himno a la Libertad"; pero hoy, solamente hoy. Mañana, como ayer, seguirás musitando melodías que llevan por título "Secret Combination" o "Always & Forever" mientras te tomas el penúltimo "frappé".

Ay, Grecia, perla de mi corazón, que me enamoraste bailando a ritmo de "tsifteteli" hace ya muchos años, engalanada con velos de seda y bisutería oriental, y hoy te mueves frenética y casi ridícula al son que te marca el último "reggaeton".

Hoy te escribo y me emociono, Grecia. Hoy te lloro porque estoy lejos de ti. Sabes bien que cuando voy a verte me acomodo en tu regazo de madre y me duermo escuchando los latidos de tu corazón, y me embriago con tu aroma de mar y de sal, y sonrío cuando te escucho cantar en tu hermosa lengua milenaria.

Hoy me entristezco, Grecia, porque muchos de tus hijos, los afortunados que están cada día cerca de ti, te cantan y te adulan en este día señalado. Hoy, solamente hoy; pero mañana volverán a insultarte, a ofrecerte tan sólo indiferencia. Mañana serás de nuevo una bella flor olvidada en un vaso de agua.

Hoy sólo quiero decirte que te amo, Grecia. Nada más. Y eso sólo puedo decírtelo de una manera:

Χρόνια Πολλά Ελλαδα!....
Σ' αγαπώ πολύ!