Poco importa si ese hermoso círculo encarnado es el disco solar o la luna llena de la Navidad de 2015 sobre el mítico
mar Egeo. Lo que importa es que esa pequeña mancha negra sobre el inmenso mar grisáceo no es otra cosa que un grupo de
refugiados sirios intentando llegar a las costas de Grecia (Yunán en árabe),
nombre que para ellos significa salvación, supervivencia, esperanza,
libertad... Y las gentes de Grecia, también en Navidad y con su
propia crisis a cuestas, están ahí esperando para ofrecer sus manos y un poco de
calor humano a los protagonistas de esta inhumana "crisis humanitaria". ¡Bravo por ellos!
Καλά Χριστούγεννα - Feliz Navidad
[La imagen es obra del
fotógrafo griego Yannis Bejrakis (@yannisBehrakis), recientemente premiado por
The Guardian como mejor fotógrafo del año 2015.]