Desconozco si el Gobierno griego ha hecho pública en su totalidad la lista de las condiciones que Grecia ha tenido que aceptar a cambio del crédito adicional de 60 billones de euros que el país recibirá para intentar superar la gravísima "crisis" económica en la que actualmente se encuentra inmerso. Imagino que sí, que debe haber un lugar al que los ciudadanos puedan acceder y en donde conste, con letra pequeña incluida, qué es lo que el Gobierno de Papandreu ha acordado, en nombre de los helenos, con la UE y el Fondo Monetario Internacional.
Lo cierto es que muchos griegos se han enterado estos días, gracias a Internet y más concretamente a la edición digital del diario turco Hürriyet Daily News, de que una de las condiciones que Grecia ha tenido que aceptar consiste en la revocación de una ley que prohibía la adquisición de bienes inmuebles en las islas griegas por parte de ciudadanos no comunitarios. Hasta ahora, la ley griega sobre la adquisición de bienes inmuebles, consideraba todas las islas del Egeo que se encuentran frente a la costa turca como "zona fronteriza". En estas islas se incluyen el archipiélago del Dodecaneso, Lesvos, Samos Jíos y Creta.
Así pues, con la revocación de esta ley, los ciudadanos y las empresas de Turquía podrán adquirir terrenos y bienes comunitarios en territorio griego, incluidas las islas mencionadas anteriormente así como también la ciudad de Tesalónica.
La noticia del diario turco refiere también que "se formarán delegaciones locales para autorizar las ventas de inmuebles en las denominadas zonas fronterizas".
Ahora cabe preguntarse si los ciudadanos y empresas turcas se lanzarán en masa a adquirir terrenos e inmuebles en las islas griegas, si desde el Gobierno de Ankara se fomentarán estas operaciones y, sobre todo, en qué sentido afectará esta nueva ley a las relaciones heleno-turcas.
Lo cierto es que muchos griegos se han enterado estos días, gracias a Internet y más concretamente a la edición digital del diario turco Hürriyet Daily News, de que una de las condiciones que Grecia ha tenido que aceptar consiste en la revocación de una ley que prohibía la adquisición de bienes inmuebles en las islas griegas por parte de ciudadanos no comunitarios. Hasta ahora, la ley griega sobre la adquisición de bienes inmuebles, consideraba todas las islas del Egeo que se encuentran frente a la costa turca como "zona fronteriza". En estas islas se incluyen el archipiélago del Dodecaneso, Lesvos, Samos Jíos y Creta.
Así pues, con la revocación de esta ley, los ciudadanos y las empresas de Turquía podrán adquirir terrenos y bienes comunitarios en territorio griego, incluidas las islas mencionadas anteriormente así como también la ciudad de Tesalónica.
La noticia del diario turco refiere también que "se formarán delegaciones locales para autorizar las ventas de inmuebles en las denominadas zonas fronterizas".
Ahora cabe preguntarse si los ciudadanos y empresas turcas se lanzarán en masa a adquirir terrenos e inmuebles en las islas griegas, si desde el Gobierno de Ankara se fomentarán estas operaciones y, sobre todo, en qué sentido afectará esta nueva ley a las relaciones heleno-turcas.